Fulleda, tierra de secano y marinada
Fulleda es uno de aquellos municipios que aún conserva el sabor y el ritmo de la vida de pueblo. Tranquilo, sin estridencias, sin prisas… A la postre, un buen espacio para pasear de manera relajada, para descubrir rincones, para dejar de lado el frenético ritmo de la ciudad y disfrutar de la paz, de la conversación sosegada, para conocer a gente auténtica, arraigada en la tierra.
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Ruta de los miradores y las fuentes
La bodega Matallonga
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Iglesia
Museo del aceite
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Las fuentes
Enoturismo
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